Sabrina Ibarra está terminando la carrera Licenciatura en Psicología, y cuenta con conocimientos en periodismo y locución, por haber realizado cursos de formación. Desde el 2016 lucha por tener una oportunidad laboral, y por evidenciar las dificultades para acceder a trabajo que tienen las personas con discapacidad visual.

Según manifestó, las posibilidades de trabajos, tanto en el ámbito público como privado, son pocas, a comparación con las que tienen las personas con discapacidad motriz o intelectual.

Si bien la Municipalidad de Bahía Blanca cuenta con el Programa Promover Igualdad, que en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Productivo y el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Mteyss) ofrece asistencia a personas con discapacidad por medio de su inclusión en actividades de fortalecimiento de las competencias laborales o de inserción en empleos de calidad y el desarrollo de emprendimientos productivos independientes, “yo ya fui cinco o seis veces a ver por qué no me daban respuestas, y no pasó nada”, indicó Ibarra.

En esa línea, expuso que la falta de trabajo para personas no videntes o con discapacidad visual no es un tema del cual se hable normalmente. Además, la importancia de que esta temática esté en agenda tiene que ver con que “de esta forma se muestra a los empresarios cuál es nuestra situación, y saber cuál es el otro lado, que por ahí presentando un currículum no te toman”.

“Está bueno que puedan saber qué cosas podemos hacer, que no tienen que adaptar nada, ni siquiera las oficinas. Con discapacidad visual hacemos vida normal. Hoy en día, con el avance de la tecnología, yo ando con mi pen drive donde tengo el lector de pantalla que utilizo en la computadora. Esta todo fácil para que nos puedan tomar”, afirmó, en comunicación con El Digital de Bahía: “Aprender, podemos aprender todo, pero experiencia no podemos tener si no nos dan la posibilidad”.

Cambiar el paradigma

Ibarra expresó que una de las principales necesidades es que desde el Municipio se tome acción: “Si vos vas a la Municipalidad, ellos te hablan siempre del vivero que manejan, donde trabajan chicos con discapacidad intelectual; con DUBA, donde van quienes tienen discapacidad motriz. Pero lo que es el ámbito de la discapacidad visual no tienen ningún organismo o institución por la que trabajen”.

“Es importante que trabajen en eso, que hagan las conexiones, que puedan sacarle la duda a los empresarios de todo lo que se les puede cruzar por la cabeza antes de tomar a una persona con discapacidad. Y después, que los empresarios vean primero la persona, y después la discapacidad. Y que se puedan acercar a nosotros a preguntarnos. Que no nos cierren las puertas, y nos den la posibilidad de mostrarles lo que podemos hacer”, concluyó.