Debieron autogenerarse el empleo con distintas iniciativas, como la fabricación de un ladrillo ecológico, construido con tierra y cemento, secado al aire libre durante 24 horas y sin cocción.

“Esta Cooperativa se empezó a realizar dentro del sistema penitenciario, nosotros somos gente liberada. Se comenzó a construir en el 2016. Por cosas del destino, se disolvió y se volvió a construir otra vez en el 2020 con compañeros que ya estaban liberados y otros que estaban privados de su libertad. Hicimos una Cooperativa de construcción y mantenimiento. Hay tres Cooperativas de liberados en Mendoza, pero son de artesanos. Sabemos que es un buen trabajo, pero no es muy rentable para muchas personas”, indicó el presidente de la Cooperativa de Trabajo San Dimas Ltda., Gustavo Biasiori.

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