Infinito por Descubrir presentó “Arbolado urbano: Nativas” en el cuál expone las ventajas de tener este tipo de plantas, sus beneficios para la biodiversidad y el clima, y la importancia de su conservación.

El arbolado es una parte fundamental de cualquier lugar urbanizado, es un regulador de temperatura, provee protección al suelo, contribuye a la regulación del clima, sirve de refugio a la biodiversidad, de barrera contra el ruido y regula gases atmosféricos, ya que participa en la captación del dióxido de carbono.

Además, es un gran aporte al paisaje del lugar y brinda beneficios al área comunitaria. Sin arbolado urbano se produce una no identidad del lugar, puede parecer cualquier lugar común. Hace aportes a la educación, la recreación, la salud y el empleo.

Existen varios motivos por los cuales se debe tener en cuenta la implementación de plantas nativas en el planeamiento del arbolado urbano. Entre los puntos a considerar, se encuentra la cuestión estética. Las nativas poseen gran variedad de flores, cortezas y texturas, por lo cual se pueden ajustar al gusto subjetivo de todas las personas.

Otro ítem es la dificultad en el mantenimiento de las plantas foráneas, y la necesidad de cuidados especiales. Las nativas están adaptadas a las condiciones de sequía, y están preparadas para soportar ese tipo de clima. Algunas cuentan con la presencia de hojas pequeñas que previenen la evaporación del agua por transpiración y otras poseen resinas cerosas en las hojas.

En cuanto a la velocidad de crecimiento, suele ser lenta cuando la planta se encuentra en condiciones naturales. Sin embargo, cualquier nativa puede experimentar un crecimiento más rápido si se aplica riego regular.

La presencia de hojas caducas y el tamaño, chico o grande, de las plantas es otro factor a considerar. En general, las especies exóticas que se utilizan comúnmente son de gran tamaño, y es necesario podarlas periódicamente. En cambio, las nativas suelen ser de porte mediano, y su uso significaría poder reproducirse y crecer en plenitud. En la ciudad pueden utilizarse Cina Cina, Jacarandás, Palo Borracho rosado, Pezuña de Vaca o Ceibo.

Las plantas nativas funcionan como biocorredores urbanos, lo cuál significa que a medida que se conecten los espacios verdes, habrá más especies de animales y de insectos que podrán vivir e incrementar el equilibrio natural y la biodiversidad.

Para conocer más sobre plantas nativas y su aporte, se puede consultar el libro “Plantas nativas de Bahía Blanca y sus alrededores; descubriendo su historia, belleza y magia”.