«Bahía Contra la Trata» es una asociación civil que funciona hace ocho años en la ciudad, realizando actividades de prevención y concientización sobre la problemática y durante el año pasado se reinventaron para seguir con su labor.

La agrupación surgió en el año 2014, con la idea de formar una asociación civil para acompañar en la ordenanza de cierre de prostíbulos en la ciudad, que finalmente se aprobó y estableció la caducidad de las habilitaciones existentes en ese momento.

“En ese momento apoyamos la ordenanza porque entendíamos que implicaba una facilitación a la explotación sexual”, explicó una de las referentes, Florencia Sánchez. En el año 2015 «Bahía Contra la Trata» se constituyó como Organización No Gubernamental.

“Nos abocamos a lo que es la prevención, la sensibilización, y para eso usamos las redes sociales. Llevamos adelantes talleres, antes interveníamos la vía pública, tenemos contacto con diferentes agrupaciones para concientizar a nivel interno: en pandemia tuvimos reuniones virtuales con centros de estudiantes, con partidos políticos, con todos los interesados en interiorizarse en prevenir y mostrar esta temática”, contó Sánchez en comunicación con la Cooperativa Ecomedios.

Además, participan en las Mesas del Municipio, del Observatorio de Redes Sociales del Honorable Consejo Deliberante, del Consejo de Niñez y trabajan a nivel provincial y nacional.

“Buscamos participar en esos espacios y poner a la trata y la explotación de personas sobre la mesa, reclamar que haya asistencia acorde a los derechos humanos de las víctimas, que éstas se puedan reconocer como víctimas y comenzar un proceso de recuperación de su proyecto de vida, que es muy difícil. Y todo esto es gracias al trabajo de nuestras voluntarias, que ocupan esos espacios y ponen a la trata de personas como una prioridad, que muchas veces no se trata de esa forma”, remarcó.

Los y las miembros de la ONG utilizaron el tiempo y las herramientas virtuales para fomentar la formación interna, la comunicación y establecer contacto con los y las sobrevivientes.

“La victima no es solamente un testigo que sirve en el juicio, es una persona que ha pasado por una situación muy compleja y muy violenta, y realmente es muy necesaria esa contención. Siempre tratamos de hacer hincapié en ¿qué pasa si rescatamos personas, pero no las asistimos? Vuelven al circuito de explotación. Las víctimas se encuentran muy solas después del rescate. Sobre todo porque después del rescate interviene Provincia en la asistencia, y ahí es donde se pierde”

El trabajo en pandemia

Respecto a la situación general durante los meses más críticos del 2020, Sánchez aseguró que la denuncia de casos disminuyó significativamente, ya que la mayor parte de las denuncias se dan por personas que ven movimientos extraños y se preocupan.

“Al no haber circulación, con las medidas de distanciamiento, la cuarentena, todo impactó directamente: durante el primer trimestre del año pasado, las denuncias fueron casi nulas, y a medida que se flexibilizaron las medidas, se reactivaron”, aseguró.

El 145 es una línea de atención telefónica gratuita para recibir información, solicitar asistencia y denunciar ante casos de trata de personas.

Se reciben denuncias de desaparición de una persona, sin tener que esperar 48 horas ya que son fundamentales para la investigación judicial; prostíbulos encubiertos que estén funcionando como café bar, club nocturno, cabaret, whiskería, casa de masajes o privados; reducción a servidumbre o trabajo forzado en talleres textiles, trabajo rural, fabril, casas particulares o en cualquier otro rubro.