Treinta jóvenes del Departamento de Ciencias de la Salud participan del seguimiento epidemiológico a personas que arriban a la ciudad desde localidades de transmisión comunitaria.

Hasta el momento se comunicaron con alrededor de 3000 personas, a través de 15 mil llamados telefónicos. En los próximos días, se sumarán actividades de llamados a personas que ya cursan con síntomas respiratorios; los colaboradores perteneces a los últimos años de la licenciatura en Enfermería y de Medicina.

Además, reciben capacitaciones para poder abordar los diferentes escenarios que puedan surgir y así brindar asesoramiento adecuado. Se trabaja en coordinación con diversas áreas comunales.

La asistencia que brinda la cubren con turnos desde sus hogares o desde la sede de Punto Digital ubicada en barrio Villa Mitre. Y además, cursan sus respectivas carreras de manera virtual.

«Cuando llamás, te enfrentas a distintas realidades y tratar de solucionar esas problemáticas a veces no son abordajes fáciles. Si advertíamos problemas de angustia, lo derivábamos a los profesionales de salud mental; si eran temas de sintomatología, a los del ámbito sanitario y si eran de aspectos sociales, como falta de comida o abrigo, al área social”, relató Micaela Palomequez, quien cursa el último año de Medicina.

Los objetivos del voluntariado, según enunció uno de los docentes coordinadores, el medico Ignacio Buffone, son “informar las medidas de aislamiento domiciliario y detectar de forma precoz síntomas que requieran evaluación en los centros sanitarios, como así también conocer necesidades o realidades que requieran contención”.