“El Progreso” del barrio Evita acompañó durante todo el año a más de 100 familias que necesitaban asistencia, manteniendo el contacto con los equipos que conforman las diferentes Ligas del lugar. 

“Cuando empezó la pandemia, arrancamos a preparar la comida”, afirmó Andrea Sepúlveda, coordinadora del actual comedor. “Cambiar fue fácil; ya dábamos la merienda, y teníamos todo. Le ofrecí a un par de mamás de la escuelita, y empezamos”.

Una vez declarado el aislamiento preventivo, Sepúlveda lideró un censo barrial en el que buscaban reconocer la situación de los vecinos, para saber cómo ayudarlos. La respuesta de la gente fue muy buena, “Vimos qué familias lo necesitaban, quienes estaban aislados. Bastante organizado. Y la respuesta de la gente fue muy buena”

Al principio asistían a 180 familias, pero a medida que la situación se aplacaba, el número comenzó a bajar. Actualmente son 120 las que reciben las viandas de comida caliente, más pan casero que preparan allí mismo. “Hay familias que dicen ‘no lo necesito, mejor dénselo a otro’” expresó Sepúlveda. 

“Tenemos mucha gente que nos colabora, y por intermedio de la Municipalidad también”, señaló. Además de esos aportes, colaboró  la Red de Salamanca, la Red de Voluntarios y personas particulares. “El Progreso tiene padrinos fijos, que acompañan también. Tuvimos mucha ayuda, de mucha gente”

Las seis personas que trabajan en el Comedor fueron convocadas por la coordinadora para elaborar los alimentos. Realizan sus tareas los lunes, miércoles y viernes, de 9 a 13 hs y este año esperan poder sumar más gente para asegurar el orden y la limpieza de las instalaciones. 

La coordinadora del espacio, que antes funcionaba como Escuelita de Fútbol en las canchas de Esmeralda y Thompson, mantiene el contacto con los equipos de veteranos y el equipo femenino. Están a la espera de ver qué habilitaciones son necesarias y qué permisos habría que presentar para el retorno a las actividades.

Sepúlveda, en comunicación con la Cooperativa Ecomedios, expresó que “El año pasado fue el primero en 10 años que no participamos de la Liga Municipal”. Por el momento, la próxima semana se reanudará la actividad del Comedor, y continúa el ropero comunitario.

“La idea es seguir hasta que todo mejore. Esperamos que no sea tan complicado como el año pasado, ya que recién a mitad de año se calmó un poco. Al principio era muy desesperante. Seguimos viendo la manera de solucionarle los problemas a la gente”. puntualizó. 

Las donaciones se pueden acercar a la sede de «El Progreso» en Thompson 2880, Barrio Evita, o generar un contacto previo a través de sus redes sociales