La Reserva Natural Pehuen Có-Monte Hermoso fue creada para preservar la costa, reservorio de huellas milenarias y animales.

Creada el 9 de noviembre de 2005, bajo la ley 13.394, tiene como finalidad preservar el patrimonio comprendido entre las costas de las dos localidades. Fue declarado lugar histórico nacional por la Cámara de Diputados en 2014, por su gran valor geológico, paleontológico y arqueológico.

“Los años iniciales fueron difíciles, no se contaba con instalaciones. Se hacían guardias en carpas, y se esperaba a la gente en medio de la playa. La ley fue el puntapié para dar inicio al proceso. Inicialmente trabajábamos con los elementos que teníamos hasta el momento”, sostiene Patricia González, docente y técnica de la reserva.

A partir de 2010 y luego de un lustro de trabajo, empezaron a aparecer hitos  de progreso. También, se proyectaron nuevas formas de protección como la colocación de alambrados, que comprendieron a las áreas 2 y 3, sector que unía Pehuen Có con Monte Hermoso. Por su parte, el área 1 se encuentra en el límite entre la villa balnearia y la base naval.

Los guardaparques designados de forma fija fue otro logro para el trabajo educativo, vinculado al turismo sustentable. La presencia continua generó un mayor interés por parte de las personas residentes y visitantes, con relevante presencia de extranjeros. “Junto con la llegada de un mayor personal, se instalaron dos puestos fijos. Todo eso hizo que haya una mayor toma de conciencia. La idea es que siempre las reservas sean visitadas. Estimulamos la caminata, y el paseo sin perturbaciones de otros tipos”, dice González.

Créditos fotos: Gentileza Patricia González

Nota completa en la edición Nº 55 de «Ecos Puntaltenses»