Se estrenó la serie basada en la icónica novela gráfica de H. G. Oesterheld y Francisco Solano López.

Desde que fue editada en 1957, son incontables los intentos de poner en pantalla a El Eternauta,  pero ninguno logró cuajar.

La razón principal de esos fracasos era el costo y las dificultades de replicar su propuesta de ciencia ficción con efectos especiales imprescindibles; hasta que Netflix se interesó en el proyecto del director Bruno Stagnaro y la productora argentina K&S;  que desembocó en esta serie de seis episodios rodada íntegramente en Buenos Aires con equipo técnico argentino.

Puntualizaciones que se relacionan menos con el chauvinismo que con lo arraigadamente local y el trasfondo social de la historieta; lo que también impulsó a Stagnaro a trasladar la acción al presente.

Cambio entendible junto con el de la edad de los protagonistas, provocado por la elección de Ricardo Darín para el personaje de Juan Salvo, del que se adueña definitivamente cuando se calza su emblemática máscara.  

Una trama distópica innovadora en la década del 50 que hoy se parece a tantas otras, aunque logra su identidad  al centrarse personas comunes que tratan de sobrevivir a una extraña nevada toxica.

Digresiones que se desvanecen ante el elenco lucido –Cesar Troncoso un Favalli notable-, la ambientación impecable, los efectos verosímiles, los temas musicales justos y el acento propio; que han sido recompensados con mayoría de críticas positivas y los primeros puestos de audiencia a nivel mundial,

Exito que ya ha confirmado el rodaje de la segunda temporada.

Ficha técnica/  Dirección: Bruno Stagnaro. Guion: Bruno Stagnaro, Daniel Staltari.  Música: Federico Jusid. Fotografía: Gastón Girod. Intérpretes: Ricardo Darín, Carla Peterson, César Troncoso, Oscar Subioto, Andrea Pietra. Origen: Argentina, USA -2025.