Son ambientes donde se produce una elevada concentración de actividad biológica, ayudan a determinados procesos del ecosistema y son atractivos para el disfrute de la naturaleza.

Los humedales influyen en el ciclo del agua y de nutrientes, protegen las costas de las tormentas y de las inundaciones gracias a la gran cantidad de vegetación que se desarrolla en ellos, aportan fertilidad a las aguas del mar, ayudan a recargar los acuíferos subterráneos de los cuales se extrae el agua dulce, utilizada para diferentes actividades humanas, y a su vez, son lugares atractivos que tienen un valor muy importante para la observación de la naturaleza.

Existen en casi todo el territorio nacional abarcando un 21.5%. Ese casi un cuarto de la superficie del país, no cuenta con una legislación específica que los proteja. Al proveer tantos recursos y resultar tan atractivos para la humanidad, los humedales se encuentran entre los ambientes más amenazados del planeta. 

Nota completa en la edición Nº 96 de Ecos Puntaltenses, producto de la Cooperativa de Trabajo Ecomedios. Todos los derechos compartidos.