En la ceremonia se celebraron los 40 años de democracia y se entregó el primer premio que lleva su nombre.

La genetista estadounidense, fue una de las impulsoras del Índice de abuelidad y no había vuelto a Argentina desde que se iniciaron las pruebas para demostrar científicamente el vínculo sanguíneo entre los niños apropiados y sus abuelas en los años 80.

En el auditorio del Centro Cultural de la Ciencia (C3), fue homenajeada por autoridades, abuelas y nietos recuperados, representantes de organismos de Derechos Humanos y el público presente y durante el acto también se entregó el premio “Mary-Claire King” a la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo. Una distinción creada por el del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) para reconocer a aquellas personas e instituciones comprometidas con la ciencia y los derechos humanos a través de estudios, campo de acción o el ejercicio de su profesión.

La científica manifestó su emoción por regresar a Buenos Aires y por el trabajo hecho con Abuelas, ya que reflejó de lo que es capaz la ciencia cuando debe responder a las preguntas importantes del pueblo y que en este caso ayudó a la recuperación de la identidad.

Por su parte, sobre el final del acto la presidenta del Conicet Ana Franchi, manifestó que quienes atacan los Derechos Humanos son los mismos que atacan a la ciencia y quieren privatizarla y agradeció a Mary-Claire por su presencia y su compromiso.