Una particular cruzada por la aceptación del destino final de todo ser viviente.

Caitlin Doughty dirige una empresa funeraria en Los Ángeles y aboga por simplificar los rituales mortuorios y normalizar sus aspectos espeluznantes, desde su canal de YouTube, sus redes sociales, sus libros y charlas TED.

Nativa de Hawái, tras ser testigo de un accidente fatal desarrollo un temor enfermizo a la muerte durante la infancia, que al crecer se convirtió en una enorme curiosidad.

Así, después de graduarse en Historia Medieval se mudó a California donde trabajó en un crematorio para finalmente y cansada de ver como se lucraba con el dolor de los deudos abrió su propia empresa y junto a otros colegas, artistas y académicos fundó la “Orden de la buena muerte”, para impulsar alternativas sustentables a los sepelios  de la actualidad.

Lo anterior puede parecer morboso, pero uno de los objetivos de la predica de Doughty es acabar con esa sensación y lo pone de manifiesto con mucho humor –negro por supuesto- en cada video, presentación personal o texto.

Como evidencia, uno de sus libros más destacados y editado en varios idiomas es: ¿Puede mi gato comerse mis ojos?, grandes preguntas para pequeños mortales acerca de la muerte (2019), donde despeja con gracia las dudas y temores que suelen acercarle los niños y de alguna manera cierra el círculo de su propia historia.

Obviamente, la manera más directa de tomar contacto con su persona y personaje es su canal de YouTube, donde por más de una década no sólo ha reflejado muertes famosas o extrañas –estilo Damián Kuc-, sino también ha hecho  dramatizaciones en las que se reserva el rol de cadáver –sic-.

¿Material no apto para personas sensibles o necesario?