El puntaltense Marcelino Domínguez se consagró campeón del Torneo Nacional Obelisco 2020.

La competencia organizada por la Federación Colombófila Argentina entregó a fines de octubre el reconocimiento a Domínguez. “Comencé a los 9 años cuando vivía con mis abuelos. En la semana venía a la ciudad para estar con ellos e ir a la escuela, y los fines de semana iba al campo con mis padres donde vivíamos”, recuerda el especialista.

La colombofilia consiste en la cría y adiestramiento de palomas para convertirlas en palomas mensajeras, capaces de volver a su palomar. Su finalidad no es llevar mensajes sino recorrer un trayecto a la mayor velocidad posible mediante relojes especiales. En nuestra ciudad, la entidad que nuclea la disciplina es La Mensajera Puntaltense, ubicada en Rivadavia 1236.

El deportista de 62 años, y que se dedica a esta disciplina desde hace 52, ya había conseguido el Nacional de Zapala en el año 2018. Sumado al reciente logro, se coronó en dos de los tres certámenes más importantes que reúnen a las palomas mensajeras. De momento, sólo le resta adjudicarse el Nacional de Curuzú Cuatiá.

Entrega a una pasión

“Estar en el patio con las palomas es algo que no se cambia por nada. Es un cable a tierra y desenchufe de los problemas cotidianos. Estoy acá y me olvido del mundo. Cuando me levanto a la mañana, ya estoy con las palomas. En verano 6.30 y en invierno a las 8. Me preparo el mate y vengo con mis palomas. Actualmente tengo 230”, cuenta con entusiasmo.

La pasión por la disciplina hizo que reemplace la cancha de fútbol por los palomares. En nuestra ciudad, fueron famosos los ubicados en Rodríguez Peña y Mitre, y Avellaneda y Pellegrini. También recuerda ir a ese lugar de joven siempre de forma sigilosa, por temor a recibir alguna represalia de los adultos presentes quienes cuidaban a las aves con recelo.

Domínguez es propietario del Palomar “El Zeppelín II”, y  obtuvo el primer y segundo lugar de la divisional fondo. La largada fue el sábado 31 de octubre desde Campo de Mayo a las 7.15 de la mañana, arribando las aves a nuestra ciudad a las 14.13, lo que determinó un total de 580 kilómetros y un desplazamiento de 82 kilómetros por hora.

“Envié 4 equipos de 2. Se envían de a 2 palomas, y cada persona puede mandar la cantidad de equipo que desee. Envié dos equipos de hembras y dos de machos. Después se saca por promedio la velocidad y luego el resultado”, explica. Las palomas llevan un anillo de identificación y un chip cuyo código de barras se constata en un reloj especial. Además, son transportadas hasta el punto de partida por camiones de las diferentes asociaciones.

En la divisional fondo, se deben recorrer entre 500 y 800 kilómetros de distancia, por lo que el representante local se destacó como el mejor exponente de la zona sudoeste, en la competencia que contó con más de 1.500 participantes y 10 mil animales.