La institución de Ingeniero White sigue realizando indagaciones con vivencias, recuerdos y objetos referidos al baño, tema de una sus próximas salas de muestra

“Trabajamos con la vida cotidiana y por eso le damos mucha importancia al proyecto de la Cocina, entonces pensamos por qué no hacerlo con el baño. Era un tema que estaba en el equipo del museo”, introduce Carolina Montero, integrante del Museo.

El lugar conserva el baño original de las instalaciones, “era un espacio que no tenía un uso muy específico”. Esto se vio como una oportunidad para trabajar sobre temáticas del cuerpo, la sexualidad, los tabúes, lo que no se dice. Desde la Fundación Williams convocaron a proyectos que quisieran trabajar con propuestas nuevas. “Concretamos la iniciativa y a fin de año- 2019- ganamos el subsidio”, resalta.

Con el objetivo de historizar las distintas percepciones del cuerpo, las diversidades sexuales, cómo se construye el mundo femenino o las femeneidades, “la menstruación, el inicio de la adolescencia, el aborto, las relaciones sexuales, la juventud, tratamos de trabajar un período amplio, por lo tanto, van convivir distintas experiencias, situaciones, objetos con temporalidades superpuestas, desde fines del siglo XIX hasta la actualidad”.

Para pensar las salas, el Museo del Puerto indaga desde la escucha, con una serie de entrevistas sumadas a un trabajo previo de investigación sobre temas de géneros. “Las primeras entrevistas que hicimos fue a una mayoría de mujeres de entre 60 y 80 años”, agrega.

Espacio de la casa

¿Cómo era el baño en tu infancia? es la punta de lanza para construir en parte una época. “Partimos del espacio físico para abordar otros aspectos involucrados con él?. Una segunda acción estuvo centrada en recibir fotografías del baño, “casi nadie tiene en su archivo familiar ese lugar, igual se amplió la participación”.

Suponen que el origen del baño está vinculado al inodoro inglés Pescadas. Cuentan en su blog que muchas personas revisaron en su memoria visual y contaron dónde habían visto uno: restaurantes, bibliotecas, institutos, cines y espacios culturales.

«Santiago Ortí, recuerda uno de su abuela que su papá había transformado en maceta; Sonia González cuenta que en su casa de la infancia tenían uno y que le daba cierto temor cuando se subía para tirar la cadena porque asociaba la palabra pescadas con atrapadas; y varixs los recuerdan acompañados por bañeras con patas. Antonio Genovali nos sitúa cerca del museo cuando cuenta haber visto inodoros como el que buscamos ¡en la estación de trenes de Ing. White!”

Otra de las situaciones subrayadas están centradas en la construcción de baños fuera y dentro de las casas. “Esto es remarcado con las casas construidas por el Peronismo y también destacan la diferencia de calidad de vida en esta situación”.

La selección de objetos es una tarea más para llevar adelante, con los que son parte del patrimonio del museo y aquellos que surgen en la documentación, imágenes y fotografías. Con la maqueta de la sala construida y una parte del baño original, “haremos intervenciones del presente y de otras épocas”.