Un largometraje indio que propone acción violenta de principio a fin.  

Kill: Masacre en el tren seria como Duro de matar (John McTiernan; 1988) sin el humor de Bruce Willis ni la elegancia de Alan Rickman, pero con todos los litros de sangre que Hollywood dejó fuera de campo desde entonces  

La acción – vaya si la hay- se desarrolla en un tren expreso hacia Nueva Dehli, donde Amrit – un entrenadísimo comando- intenta convencer a su novia de escaparse con él antes que la familia la case con un ricachón.

Paralelamente, una banda de dacoits –criminales- se dispone a robar a mano armada al pasaje y escapar en una estación intermedia; plan sencillo que se convierte en infierno sobre rieles, cuando toman de rehén a la novia mencionada y Amrit –debut impresionante de Lakshya- va al rescate.  

Trama sin piedad, porque la lucha es a muerte y porque el director y su coguionista no ahorran detalles del tránsito de una a la otra.  

Estreno rarísimo en las salas comerciales argentinas, por provenir de India y por la calificación SAM18; aunque llegó con el aval de su participación en el Festival de Toronto (TIFF).

Los espectadores que se animen al gore, se asombrarán con la calidad de la imagen, las coreografías y la música y quedarán atornillados a su butaca hasta la inusual secuencia del final.

Y mejor ver esta versión original, porque fue confirmada una remake de la compañía estadounidense 98 Eleven Production, que la va a descafeinar. 

Ficha técnica/ Dirección: Nikhil Nagesh Bhat. Guion: Nikhil Nagesh Bhat, Ayesha Syed. Música: Haroon-Gavin, Vikram Montrose, Shashwat Sachdev. Fotografía: Rafey Mehmood.  Intérpretes: Lakshya, Raghav Juyal, Tanya Maniktala, Abhishek Chauhan. Origen: India – 2023. Calificación: Sólo apto para mayores de 18 años.