Empezaron de cero, juntando latas de durazno para armar los primeros almácigos. Con pallets de madera en desuso fabrican los huerteros. Y también intercambian botellas de plástico reciclable por plantines.

La Cooperativa de Trabajo La Ruda Ltda. surge de la necesidad laboral de un grupo de personas en el barrio porteño de Villa Crespo, que después de dar sus primeros pasos organizándose, adoptaron el formato jurídico de la Cooperativa.

“Comenzamos con este proyecto colectivo un poco antes de la pandemia, al principio reciclando latas de durazno que juntábamos en el comedor que tenemos acá en el playón”, recordó Sonia Marlene Manzoni, presidenta de la Cooperativa. Apuntó que en este lugar les preparan “viandas a nuestras infancias que están todo el día acá con nosotros”.

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