El Baúl de Roberta se propuso juntar la pasión de su impulsora por las manualidades y la educación en los infantes, y volcarla en una gran variedad de juegos y juguetes, fabricados con materiales ecológicos, que promueven la crianza respetuosa y el estímulo de la imaginación de los niños y niñas.

“A mí lo que más me interesa es que todos conozcamos un poco de qué va cada juguete. A veces uno no dimensiona todo lo que se puede hacer con uno solo; todo lo que podés estimular en los niños. Quiero que se entienda que todos brindan un aporte pedagógico a su desarrollo”, comenzó, en diálogo con EcoMedios, la emprendedora Valentina Di Iorio.

Los juguetes de madera, inspirados en los tres pedagogos Montessori, Pikler y Waldorf, y destinados a niños y niñas de entre dos meses y diez años, -“también hay una cápsula para más bebés que tienen tela, pero en su mayoría son todos del mismo material”-, cumplen el propósito de Valentina: “enseñarles a los grandes a acompañar a sus hijos, o proponerles juegos con un marco pedagógico que ayude a favorecer y estimular sus sentidos; que sea un proceso respetuoso con sus tiempos y crianza”.

Respecto a la confección de los productos del proyecto que le debe su denominación a la conjunción “del bebote de mi primera hija y un baúl de mi abuela que tengo en casa. Entre las dos generaciones armé el nombre”, algunos “los hago yo y otros no, pero sí los pinto y les doy mi impronta. Uso mucho los colores pastel porque me gusta que son más calmos y tranquilos”, sostuvo.

Comienzos y proyecciones

“Detrás de todo esto estoy yo sola, desde que surgió en septiembre del 2020. Mi trabajo anterior era en una editorial, y soy maestra jardinera, y cuando me despidieron sentí que era el empujón que me dio la vida para empezar lo que venía pensando. Quería algo nuevo y diferente, que me permitiera juntar mi pasión por el arte, la educación y los niños”, reflexionó.

La posibilidad de emprender, a lo que ella define como parte de su vida, le permitió “generar, arrancar y ponerle mi impronta a todo lo que hago. Desde muy chica hacía pulseritas y vendía, hacía tortas, juntaba revistas para vender. Nunca me quedé solo con mi profesión. Siempre estuve buscando otras tareas y cosas para hacer”, contó.

El Baúl de Roberta, impulsa “una marca sustentable y sostenible con el medioambiente. Trato de que nada tenga plástico. Los juguetes al ser de madera son ecológicos. Además son durables y atemporales. Las pinturas no son tóxicas y el packaging es reciclable. Intento hasta no usar ganchos de abrochadora, para que todo sea compostable”, remarcó.

Para finalizar, Valentina expresó que sueña con “tener un negocio, con su cartel gigante, lleno de juguetes, a donde entren las familias, y toquen y vean todo.  A veces digo que no soy tan vendedora, ya que no vendo lo más caro, porque priorizo que al nene le sirva, le guste y le interese en ese estadio de su crecimiento. Poder asesorarlos es muy importante para mí también”.

Los y las interesadas en conocer más sobre esta iniciativa bahiense pueden comunicarse con la emprendedora al WhatsApp 291 4615614, o a través de Instagram.