El Programa Bahía Lee abrió la convocatoria para integrar voluntarias y voluntarios al grupo de narradores y lectores orales para el año 2024.

Este voluntariado sin fines de lucro comenzó en el 2012, creado por Ordenanza Nº 17.532 y sancionado en el año 2013 por el Honorable Concejo Deliberante para todo el partido de Bahía Blanca. Su objetivo es generar un espacio de encuentro alrededor de la promoción de la lectura y la literatura.

Actualmente, busca nutrirse, mediante el intercambio de experiencias con otras personas, en el arte de la lectura en voz alta y en la narración oral.

La coordinadora del espacio, Julieta Fanelli, contó: “Ser voluntario de Bahía Lee significa acercarse a las escuelas que soliciten la visita para regalar en cada aula lecturas apropiadas para las edades de quienes las reciban. El público va desde alumnos de inicial, primaria, secundaria, adultos, y adultos mayores”.

“El grupo está conformado, hace ya unos cuantos años por hombres y mujeres de diferentes edades y ocupaciones. Algunas personas, por un tema de edad avanzada, salud, nuevos proyectos personales, van rotando año a año. Es por eso que deseamos incorporar nuevas voces, como ocurre en cualquier agrupación”, agregó, en comunicación con El Digital de Bahía.

Para ser parte del voluntariado solo se necesita ser mayor de edad, disponer semanalmente de una o dos horas para los encuentros presenciales en los que se trabaja en la dinámica de lectura y narración, la selección de autores, entre otras responsabilidades. Además, es importante saber que a la hora de ir a las instituciones que nos inviten, el voluntario elegirá según sus intereses y tiempo disponible a donde ir. “Vamos en grupo, siempre con la presencia mía, como coordinadora y responsable del grupo”, puntualizó.

Contar y escuchar

Respecto a la importancia de generar estas propuestas, Fanelli afirmó que “estos espacios, además de hacer sentir muy útil a aquel que tenga un ratito de tiempo para regalar; el hecho de llevar la palabra literaria, de ponerle voz a tantos cuentos que están dormidos en alguna biblioteca, provoca tanto en el que lo lee o narra, como en el que los escucha, un momento mágico que es único e irrepetible. Es muy difícil que alguien se resista a escuchar una historia, y más si está bien contada. Por eso es sumamente necesario que el voluntario se prepare para ello”.

“Estos espacios sociabilizan, trabajan la sensibilidad y fomentan el compañerismo. Este grupo es como una gran familia. Compartimos lecturas, pero no somos ajenos a la vida misma”, concluyó.

Quienes quieran participar, pueden enviar un correo electrónico a [email protected], indicando nombre y apellido, edad y teléfono de contacto. Luego, seleccionará el horario de los encuentros presenciales que son los lunes de 15 a 17hs o los martes de 10 a 12hs, en la Biblioteca Rivadavia, Av. Colón 31.