De elevada actividad biológica, intervienen benéficamente en el ecosistema y son atractivos para el disfrute natural.

“El estuario de la Bahía Blanca es un humedal costero, se extiende frente a los partidos de Coronel Rosales, Bahía Blanca y Villarino, compuesto por numerosas islas e islotes interconectados por una red de canales de marea”, informó la ONG Humedal Arroyo Pareja Isla Cantarelli (Hapic).

Los humedales influyen en el ciclo del agua y de nutrientes, protegen las costas de las tormentas y de las inundaciones. Además, aportan fertilidad a las aguas del mar, ayudan a recargar los acuíferos subterráneos de los cuales se extrae el agua dulce, y a su vez, son atractivos para la recreación y la observación de la naturaleza. Existen en casi todo el territorio nacional abarcando un 21,5%. No cuenta con una legislación específica que los proteja, a pesar de que son los ambientes más amenazados del planeta.

Humedales locales

Dentro de la región, se reconocen siete subsitios desde la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras:  Reserva Natural Provincial Bahía Blanca, Bahía Falsa y Bahía Verde, Reserva Natural Provincial Islote de la Gaviota Cangrejera, Reserva Natural Municipal Costera de Bahía Blanca, Área Natural Arroyo Pareja Isla Cantarelli, Humedales de Villa del Mar, Reserva Costera Humedal Cuatreros de Cerri y Humedales de la Desembocadura del Río Sauce Chico. Cubre un total de 263.508 hectáreas. Se encuentra camino al balneario Arroyo Pareja y posee una superficie de setenta hectáreas, casi el 50% corresponde a una zona intermareal y de marismas.

Nota completa en la edición N° 70 de Ecos Puntaltenses, producto de la Cooperativa de Trabajo Ecomedios. Todos los derechos compartidos.