Desde el Museo de Ciencias ubicado en el Parque de la Ciudad denuncian actividades privadas sobre un predio que está protegido por tratarse de una reserva urbana de Caldenes.

El día de ayer autoridades del Museo de Ciencias fueron notificadas por vecinas y vecinos sobre la presencia de máquinas topadoras trabajando en la reserva urbana de Caldenes. Este espacio de tres hectáreas está a metros de la institución y fue declarada patrimonio urbano por decreto 898/2006, y por la ordenanza 13961/2006 del Municipio de Bahía Blanca, y por esta acción humana se han perdido decenas de estos árboles en crecimiento.

La referente del Museo, Liliana Descanio, contó que “nos acercamos al lugar y corroboramos que en la parte central del predio, una zona de pastizales, con algo de vegetación arbustiva, había sido removida la tierra en un sector rectangular muy grande que, si bien no tocaba los árboles, estaba bastante próximo”.

Antecedentes del caso

“En marzo del 2021 pasó algo similar y había sido dirigido por el presidente del Club Pacífico, y pensamos que podía llegar a tener alguna conexión”, contó, en diálogo con la Cooperativa de Trabajo Ecomedios: “La conexión que hacemos va de la mano de un posteo que realizó el Club, donde agradecen la donación de esta parte del parque de la ciudad para la construcción de una cancha de futbol. Posteo que, automáticamente, cuando empezamos a hacer publicaciones y responder comentarios, eliminaron de las redes”.

Ante lo ocurrido en 2021, Descanio inició un expediente a través de una nota informando la situación y el estado del predio en ese momento. Se realizó un recuento de plantas faltantes, algunas de las cuales habían ido a buscar a La Pampa, ya que fueron donadas por el Vivero de la Provincia. Además, había cartelería informativa educativa e informativa que el Museo logró desarrollar gracias a un subsidio del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Provincia.

“Eran más de veinte carteles, de los cuales la mayoría había sido tirados abajo en esa primera intervención de las maquinarías”, contó la referente, y remarcó el hecho de que “se pidió la reposición de la cartelería y las plantas que estaban faltando, pero ese expediente no se ha movido. Pasó el tiempo, y el espacio sufrió incendios que claramente fueron inducidos intencionalmente, que terminaron por destruir el resto de la cartelería”.

Valor patrimonial y natural

El Caldenal representa un espacio único en la ciudad, y desde diciembre de 2018 el Museo inauguró allí un Jardín de Nativas. En el predio se desarrollaban visitas guiadas a establecimientos educativos, adultos mayores de Upami, y se han organizado varias actividades.

Descanio indicó que “incluso iniciamos este año un proyecto con una escuela para sembrar y luego trasplantar especies nativas en este predio”.

“Yo me comuniqué con el director del museo, Cristian Díaz. El por su parte estuvo averiguando con el secretario, con el Instituto Cultural, con el titular de Espacios Públicos y la directora de Parques, y ellos desconocían de este procedimiento. Hasta ahora no se acercó ninguna autoridad a corroborar esto o a desmentirlo, pero la realidad, las fotos y lo que estamos viendo acá, es esto: Hay una parte que fue claramente desmontada para hacer algo, porque es un rectángulo perfecto”.

Además, destacó que parte de la promesa del Club fue “hacer no solo una cancha, sino vestuarios, baños, gradas e iluminación. Los caldenes que están pegados a esto van a sufrir claramente la acción humana, y dudamos que los dejen en pie”.

A raíz de esta situación, el día sábado 16 de julio se llevará a cabo un abrazo solidario al Caldenal, de la mano de vecinas, vecinos, profesionales y organizaciones ambientalistas de la ciudad. También se hará un ciclo de acciones artísticas y ambientales, y se compartirán posteos informativos sobre la importancia del caldén y del sector de la reserva en Bahía Blanca.