Buscan crear conciencia sobre el patrimonio natural de la zona
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Realizaron una charla sobre la preservación de la Reserva Natural Pehuen Có- Monte Hermoso, que cumplió 15 años de existencia. Se creó el 9 de noviembre de 2005 bajo Ley provincial Nº 13.394. 

Es un sitio geológico, paleontológico y arqueológico, y el territorio está conformado por tres áreas, las dos primeras se encuentran en Pehuen Có y la tercera en Monte Hermoso. 

“La Reserva tiene como finalidad la preservación de sus yacimientos paleontológicos, fósiles de megafauna extinta -de hace 12 mil años- y sitios arqueológicos, donde se encuentran también huellas humanas, principalmente en el área tres, que datan de 5.000 a 6.500 años, en el holoceno.”, contó la responsable técnica en Educación, Patricia González.

Los restos de vertebrados fósiles fueron descubiertos por primera vez en 1832 por Charles Darwin, quien utilizó estos datos para constituir la base de su obra Origen de las Especies, y se calcula que ascienden a 5 millones de años.

La Reserva construye consensos para el uso sustentable del recurso natural junto a los museos de Coronel Rosales y Monte Hermoso, y las oficinas turísticas de los partidos aledaños. 

Sectores

Desde la bajada de la calle Coronel Rosales hasta el límite con el partido de Monte Hermoso se encuentra ubicada el sector 2, donde se concentran las actividades turísticas y recreativas. El tránsito peatonal se puede realizar hasta la bajada de El Arbolito, no se permite el ingreso de vehículos, tampoco se puede pescar; no es apto para nadar ya que no cuenta con servicio de bañistas.

Los vehículos 4×4 pueden descender por la bajada de El Arbolito, también están incluidos los cuatriciclos, no se permiten motocicletas. En los casos habilitados, solo está indicado para estacionar, no para realizar paseos. El tránsito por los médanos está prohibido.

Al llegar al alambrado, que delimita el área más vulnerable, actualmente se ingresa con servicio de guías habilitadas. De esta forma, se garantiza la actuación de los protocolos establecidos para este tiempo de pandemia por Covid-19.

El área 3 se encuentra ubicada en el partido vecino, con un área para bañistas y peatones. Posteriormente, es posible visualizar las huellas humanas, y también se debe visitar con personal especializado.

Formar generaciones

Gran parte del trabajo de preservación compromete la difusión y educación sobre el sitio y las riquezas que resguarda. “Se realizan actividades dirigidas a todos los niveles, desde Inicial a Superior. Durante los meses de septiembre, octubre y noviembre se organizan las salidas educativas. Llegamos a atender y acompañar cerca de tres mil estudiantes, con quienes intercambiamos propuestas de cuidado medioambiental”. 

Además, realizan capacitación para docentes. Bajo los términos de educación ambiental inclusiva brindan estrategias para que la totalidad del estudiantado tenga acceso a la formación y conocimiento.

“Nadie discute hoy la importancia de la preservación de los recursos naturales, esto significa una evolución”, afirmó la especialista. Los desafíos siguen estando presentes, en especial las interacciones que producen impacto en el medio ambiente en relación a los usos y costumbres.

Sigue preocupando el tránsito vehicular sobre la playa, una conducta que acelera procesos vinculados a la erosión costera. Producen la compactación de arena tanto hacia el médano como en el mar, indiscutiblemente altera la biodiversidad.

Un ejemplo está dado por la necesidad de supervivencia de los invertebrados que habitan en la costa y son alimento de las aves playeras que nidifican en las áreas próximas. También, los vestigios arqueológicos se ponen en peligro. La lagartija de las dunas es una especie en alerta de preservación, “fue declarada monumento natural para otorgarle un nivel de protección mayor debido a su situación vulnerable”.

En el sector 2 de Pehuen Có y el área 3 de Monte Hermoso está prohibido el ingreso de animales domésticos, como en todas las áreas protegidas, según reglamenta la legislación. El comportamiento de las mascotas impacta en la biodiversidad del lugar y es incompatible con la fauna silvestre, por ejemplo los ladridos espanta la fauna, que son sensibles a cualquier cambio. Por otra parte, los desechos de estos animales, aunque sean levantados, pueden ingresar enfermedades al hábitat. También porque obstaculizan las visitas, que buscan conectar con la condición natural del sitio.

Asimismo, se trabaja para comprometer a turistas y locales en un espacio libre de animales entre las bajadas de la calle Coronel Rosales hasta El Arbolito. “Queremos ofrecer un lugar para disfrutar de la playa sin interferencias”, apuntó González.

El equipo está integrado por un guardaparque inspector, responsable de la administración y manejo del lugar; una bióloga encargada del manejo de la fauna; una técnica en Educación, que está dedicada al programa del uso público del recurso, incluso las actividades recreativas, educativas, turísticas y de comunicación.

También se suma la tarea del equipo de guardaparques, uno para cada sector. Cuentan con un servicio de guías especializadas, que se brinda de manera externa, están capacitadas directamente por la Reserva, y tienen la habilitación correspondiente.

Fuente: Ecos Puntaltenses

Categoría: Ambiente
2021-01-25 16:16:01
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