Por Silvana Angelicchio, para la Cooperativa de Trabajo EcoMedios Ltda.

La demorada tercera entrega de la franquicia mudó su acción al Amazonas peruano.

Tras el considerable suceso de Paddington (Paul King; 2014) y Paddington 2 (Paul King; 2017) se confirmó otra secuela que fue retrasada por la pandemia y la huelga de actores posterior.

Finalmente, los espectadores reencontramos al osito Paddington más inglés que nunca y viviendo feliz en Londres hasta que una carta de su Perú natal le advierte que la Tía Lucy lo extraña demasiado y decide hacerle una visita acompañado por su familia humana, pero cuando llega a la residencia para osos retirados donde residía ella ha desaparecido y un misterioso mapa indica que se ha internado en la selva.

Si los dos largometrajes previos  y la mayor parte de las colecciones de cuentos escritos por Michael Bond a partir de 1958 se basaban en los choques del osito  antropomórfico con la gran ciudad, este tercero no sólo se aleja geográficamente sino en el tono de esa premisa, ya que se impone una búsqueda con referencias evidentes a la saga de Indiana Jones, a Werner Herzog y al mismísimo Buster Keaton.

Esta vez el mensaje va rutinariamente para el lado de recuperar las raíces, el ritmo narrativo se pierde en meandros enormes como los del Amazonas y el osito queda bastante opacado por el marinero de rio interpretado por Antonio Banderas y la  monja casi almodovariana de Olivia Colman; pero los más pequeños – los principales destinatarios de los cuentos y estas traslaciones-, van a disfrutar de las peripecias.  

Ficha técnica/  Dirección: Dougal Wilson.Guión: Mark Burton, Jon Foster & James Lamont. Fotografía: Erik Wilson. Música: Dario Marianelli. Intérpretes: Emily Mortimer, Olivia Colman, Antonio Banderas. Origen: USA, UK, Francia, Japón -2024. Clasificación: Apta para todo público.