Por Lucía Argemi, para la Cooperativa de Trabajo EcoMedios

La editorial ‘Salta y Perú’ surgió como un soplo de aire fresco para la escena cultural y de las letras bahiense. Con cuatro títulos, que le dan inicio a distintas posibilidades, oportunidades, historias y talentos, invita a conectar con el trabajo artesanal y el arte visual. 

El proyecto impulsado por Matías Matarazzo, Milton López y Sebastián Morfes, le dio vida a los libros de los autores locales: ‘Así aprendió Wilson’, de Matías Matarazzo y ‘El verano del artista’, de Milton López; y de Buenos Aires: ‘Río de Janeiro’, de Victoria Blanco y ‘Bache’, de Manuel Alemián. Para febrero o marzo, hay unos cuatro o cinco títulos más que esperan poder expandir los horizontes literarios de la región.

“Bahía Blanca tiene una tradición de editoriales, publicaciones y talleres de por lo menos 40 años. Hay editoriales que tienen trascendencia nacional o que han marcado parte de la historia de la edición en la ciudad, como también hay experiencias de pequeñas editoriales artesanales que tienen otra forma de circulación de la poesía, más cercana, más de mano en mano”, comenzó el poeta, Matías Matarazzo.

La iniciativa que reúne poesía y cosas del barrio, se pensó como un espacio abierto. “Tenemos en vista hacer una colección, por ejemplo, de relatos hechos con dibujos. Ya tenemos dos libros de ese estilo en carpeta, y después será más centrada en la poesía. Creo que una de las características de las ediciones, que se irá profundizando, tiene que ver con que sean libros obras, que tengan alguna característica especial. En estos primeros las piezas artísticas son creaciones de Milton López”, explicó.

Una historia nacida en el barrio

‘Así aprendió Wilson’ es la tercera obra publicada por Matías Matarazzo y da cuenta de una parte de la historia de su abuelo. Hace algún tiempo, encontró en su casa un libro de escritura de segundo grado, del año 1942, que aquel utilizó para aprender manuscrita, en la escuela italiana que había en Bahía. A su nieto, la manera en que las palabras estaban colocadas le llamó la atención.

“Me hizo pensar en la escritura manuscrita como un dibujo, en un momento en donde el niño todavía hace las letras dibujando, y que los sonidos de las palabras se unen por su sonoridad, más al estilo de una canción. Eso me llevó a armar una reescritura en poemas. Es un libro bastante experimental de procedimientos, de collage, de cortar y pegar, que también tiene un efecto en la lectura, porque hay frases que llaman la atención, y cada uno le encuentra su propio significado”, contó.  

Cada ejemplar producido por dicha editorial barrial, también intenta unir al arte escrito con el dibujo. “Todos vienen con una obra de Milton López basada en la lectura del libro. Esto crea un poco el espíritu del proyecto, para el que nos propusimos acercar las artes plásticas y la poesía. Todos los títulos de la editorial vienen con pinturas y con algún elemento gráfico”, agregó.

Respecto al nombre, tiene que ver con que la zona de ‘Salta y Perú’ los reúne como vecinos. “Son calles que no se cruzan, pero los tres editores vivimos por ahí. Además, la casa de Wilson, donde encontré su libro, está en Alvarado y Perú. Cuando pensamos en esto, nos motivó la idea de hacer las entregas personalmente, las producciones a mano y que sean pocas tiradas iniciales. La poesía, a veces, ocupa este lugar de no seguir las corrientes más generalizadas”, finalizó.

Los y las interesadas en adquirir cualquiera de los ejemplares o para más información, se pueden comunicar a través del Instagram.