Rowan Atkinson ha vuelto a la pantalla chica en modo Mister Bean.

El inglés Rowan Atkinson tiene una carrera de casi cuatro décadas y ha interpretado muchos personajes, pero para el público propio e internacional es Mr. Bean: El personaje torpe e inmaduro de la serie que se grabó entre 1990 y 1995 y fue retomado en cortos animados y dos largometrajes.

El actor diversificó sus interpretaciones y encarado otros géneros, como el policial dramático en Maigret (2016/17), pero en Hombre versus Abeja  ha vuelto en parte a su arquetípico personaje.

Parcialmente, porque el protagonista de esta miniserie de nueve episodios de alrededor de 15 minutos, se llama Trevor y suele obsesionarse con pequeñeces que lo meten en unos líos tremendos, aunque comparte la misma gestualidad y humor físico de Bean.

Los fanáticos reconocerán la referencia de la tarteleta de cereza, que Trevor intenta comer en su primer día como cuidador de una mansión lujosa y llena de objetos valiosos. Debut auspicioso en un trabajo que le permitiría cumplir el sueño de reencontrarse con su hija adolescente, aunque un abejorro no lo deja en paz y lo lleva a cometer flor de desparramos.

Una trama simple y algo manida con la que Atkinson revalida su merecido título de especialista en slapstick y con la que el público va a disfrutar de unas cuantas carcajadas, si entra en el juego y no cuestiona demasiado la verosimilitud de ciertos gags.

Indudablemente, de lo mejor que la plataforma Netflix lanzó en este mes de julio.

Ficha técnica/ Dirección: David Kerr. Creación y guion: Rowan Atkinson, Will Davies. Intérpretes: Rowan Atkinson, Jing Lusi, Julian Rhind-Tutt, Greg McHugh, India Fowler. Música: Lorne Balfe. Fotografía: Karl Oskarsson.  Origen: Reino Unido; 2022.